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En Survivor México, la supervivencia no solo se mide por la habilidad física o la estrategia social. El respeto a las reglas también es clave.
Y parece que Julieta Grajales, conocida por su carácter fuerte y su papel como "villana" del reality, podría pagar un alto precio por cruzar una línea que ya antes generó polémica: aceptar comida externa.
Recordemos que en ediciones pasadas, Warrior —el conductor del programa— regañó severamente a Pablo y Aarón por comer alimentos de la tripulación. Ahora, el caso se repite, pero esta vez con consecuencias aparentemente más graves.
Fue el 15 de mayo cuando la cuenta de filtraciones “Info Exavivor” soltó la bomba: Julieta Grajales habría sido acusada por su compañera Saadi de recibir comida de un trabajador de producción. El acto fue interpretado como una clara violación al reglamento, y según rumores, la producción habría decidido expulsarla del programa.
A diferencia de otras ocasiones donde los participantes recibieron advertencias o castigos menores, esta vez la situación escaló rápidamente. Además, el miembro del staff que le entregó la comida también habría sido despedido, lo que sugiere que la producción busca sentar un precedente claro: en Survivor, romper las reglas tiene consecuencias reales.
Carlos Guerrero, conocido como Warrior, ya había sido claro en transmisiones anteriores: no se tolerarán más incidentes relacionados con alimentos no autorizados. El ambiente de tensión entre tribus y la presión del juego parece haber empujado a Julieta a tomar una decisión impulsiva… que podría costarle su lugar.
Hasta el momento, la información no ha sido confirmada oficialmente, pero los seguidores del reality ya están atentos a lo que podría ser una de las salidas más polémicas de la temporada. ¿Se despedirá Survivor México 2025 de su villana estrella o le darán una segunda oportunidad? La isla tiene la última palabra.