Esta semana, los medios internacionales 'pusieron el ojo' sobre la realeza británica, tras el anuncio de la operación a la que se sometió Kate Middleton, la princesa de Gales, este hecho, prendió las alarmas, pues a pesar de que el comunicado oficial, señala que se trató de un sencillo procedimiento de estomago, entre rumores y verdades, señalan que Kate, podría padecer algo de mayor gravedad.
"La operación fue un éxito y se espera que permanezca en el hospital durante diez o catorce días antes de regresar a casa para continuar con su recuperación".
Añadiendo que, en principio, retomará sus funciones oficiales después de Semana Santa. La princesa se encuentra en The London Clinic, un centro médico con casi un siglo de historia al que ya ha recurrido anteriormente la Familia Real.
Esta situación ha causado preocupación entre los seguidores de la Familia Real Británica, sobre todo después del anuncio de que el rey Carlos III también visitará al médico la próxima semana.
El cuadro clínico de la princesa, se mantiene en cautela y tras los rumores, la Royal Family, descartó que se trate de algún padecimieto cancerígeno y que suvisita al médico fue “planificada”, por lo que no resultó en una emergencia de salud.
Al respecto, Middleton, expresó su deseo de mantener en privada su condición de salud, por respeto a sus hijos, los príncipes George, Louis y la princesa Charlotte.
“Ella espera que el público comprenda su deseo de mantener la mayor normalidad posible para sus hijos”.
Señaló el Palacio de Kensington.
Kate Middleton estará en observación en el hospital durante las dos semanas siguientes y se espera que se retire de sus funciones hasta por 3 meses.
La Familia Real Británica compartirá más información “significativa” cuando ocurra un avance en la salud de Middleton. Mientras tanto, la princesa de Gales descansará en su habitación en The London Clinic, que se describe como el hospital privado más grande de Londres.