La falta de espacios en el panteón municipal de Tenochtitlán se ha convertido en un tema prioritario para la administración encabezada por el presidente municipal, Abraham Landa Candanedo, quien reconoció que la sobresaturación de este lugar pone en riesgo la dignidad y el respeto hacia los difuntos de la comunidad.
En su búsqueda por resolver esta problemática, el edil informó que se han explorado terrenos aptos para un nuevo panteón, pero los elevados costos han dificultado los avances, "algunos propietarios pretenden vender dos hectáreas por hasta 40 millones de pesos, un precio totalmente desproporcionado y contrario al interés colectivo", declaró.
"Estamos dispuestos a pagar hasta un millón de pesos por hectárea, siempre y cuando sea un precio justo que beneficie a la comunidad", subrayó el alcalde, haciendo un llamado al Comité Pro Panteón para sumar esfuerzos en la identificación de un terreno accesible y adecuado.
Este desafío evidencia la urgencia de actuar con rapidez para evitar que los intereses económicos particulares afecten a una comunidad que necesita un espacio digno para honrar a sus seres queridos, la administración y los ciudadanos deberán encontrar una solución que priorice el bienestar colectivo por encima del lucro privado.