Ante el colapso vial y económico por el cierre de la Autopista 150D Orizaba- Puebla a la altura del lugar conocido como El Mirador en el kilómetro 231, la Coparmex Delegación Orizaba urgió a las autoridades atender el rezago en carreteras federales.
Así mismo exigieron una evaluación rigurosa de las condiciones actuales para impulsar soluciones que eviten futuras crisis y restauren la confianza en el sistema vial del país.
"Instamos a las autoridades estatales y federales a replantear de sus políticas de conservación y respuesta en rutas. estratégicas, además de implementar un plan preventivo que garantice la seguridad en el tránsito y proteja la productividad regional".
Los empresarios transportistas agremiados a la Cámara, aseguraron que la Autopista 150D Veracruz- México es una de las arterias más importantes del país, con un flujo diario de cerca de 30 mil vehículos., por lo que la autoridad debe reconocer su relevancia y destinar los recursos necesarios para su conservación y futura ampliación.
Dejaron en claro que este incidente evidencia la urgencia de modernizar las carreteras y fortalecer a las instituciones encargadas de su supervisión; la comunidad de transportistas, empresarios y ciudadanos demandan una revisión profunda de la infraestructura federal y un plan de largo plazo que asegure vías seguras y funcionales.
"Aunque el Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, informó que Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) ha "intensificado" las labores de reparación, el hecho de que la normalización del tráfico pueda prolongarse hasta seis días -o incluso más- evidencia una deficiencia seria en la infraestructura de respuesta rápida ante contingencias de esta magnitud".
Señala que la descripción del deslave como una situación "compleja" que afecta un área de más de 150 metros de longitud, 40 metros de ancho y 12 metros de altura no justifica el retraso en la respuesta ni la falta de alternativas robustas.
En voz de uno de los socios de la Coparmex Delegación Orizaba, de la empresa Transportes Especializados O.R.D., ha señalado con firmeza el fuerte impacto que la falta de previsión y de infraestructura de respuesta rápida en las carreteras federales tiene sobre la población en general, y en particular sobre los transportistas.
"Esta situación afecta directamente a los operadores, quienes deben enfrentar jornadas de más de ocho horas de viaje, con el desgaste y fatiga que esto implica, afectando además la competitividad y movilidad de la región".
La Coparmex subrayó que estos problemas evidencian el rezago en infraestructura crítica y la urgente necesidad de una mejor coordinación entre autoridades para prevenir incidentes similares.
El socio también cuestionó la prolongada demora de seis días en restablecer el tránsito tras incidentes en las carreteras, calificándola como "excesiva" y manifestando su preocupación por los operadores, quienes enfrentan riesgos adicionales como asaltos y accidentes en tramos inseguros y deteriorados.