AirCar: así luce el 'auto que vuela' ¿cuándo estará a la venta?

Desde hace décadas, la ciencia ficción ha alimentado una fantasía colectiva: vehículos que surcan los cielos como si fueran parte de la vida cotidiana.

Hoy, esa visión está más cerca de concretarse gracias a Klein Vision, una empresa eslovaca que ha desarrollado el AirCar, un automóvil híbrido capaz de transformarse en avión en menos de dos minutos. Su llegada al mercado está prevista para 2026, con un precio estimado entre 800 mil y 1 millón de dólares.

Ingeniería de dos mundos: tierra y aire

El AirCar es una fusión entre diseño automotriz de alta gama e ingeniería aeronáutica certificada.

Desarrollado durante más de 30 años, este modelo puede alcanzar hasta 200 km/h en carretera y 250 km/h en el aire, con una autonomía de vuelo de 1.000 kilómetros. Su corazón mecánico es un motor de 280 caballos de fuerza, que permite transiciones rápidas y efici entes entre los modos terrestre y aéreo.

AirCar: así luce el 'carro que vuela' ¿cuándo estará disponible?

El vehículo ya ha sido sometido a más de 170 horas de vuelo y ha superado 500 pruebas de despegue y aterrizaje, lo que lo llevó a obtener en 2022 el Certificado de Aeronavegabilidad otorgado por la Autoridad de Transporte Eslovaca.

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¿Dónde y cómo se podrá usar?

Pese a sus credenciales técnicas, el uso del AirCar estará restringido inicialmente a vuelos controlados y no comerciales. Es decir, nada de despegar desde tu garaje: requerirá pistas autorizadas o aeropuertos. Esto lo posiciona más como un avión personal con ruedas que como un coche urbano volador.

AirCar: así luce el 'carro que vuela' ¿cuándo estará disponible?

Un mercado exclusivo y con desafíos

El AirCar abrirá un nuevo nicho para clientes adinerados que buscan experiencias únicas, pero difícilmente revolucionará el transporte urbano. La necesidad de licencias de piloto, infraestructura especializada y regulaciones aéreas más complejas hacen que su adopción masiva sea, por ahora, inviable.

Mientras tanto, tecnologías como los VTOL (vehículos de despegue y aterrizaje vertical) parecen avanzar con más realismo hacia una integración metropolitana. Aun así, el AirCar representa un hito: es el primer paso tangible hacia los autos voladores que generaciones han imaginado.