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Si alguna vez abriste TikTok y viste a un cocodrilo tocando un bombardino mientras un tiburón de tres patas baila al ritmo de una canción italiana psicodélica, ya formas parte —aunque no lo quieras— del movimiento viral más bizarro del internet reciente. Su nombre no oficial: neo-frikismo digital.
Todo comenzó con un video aparentemente sin sentido: un personaje disfrazado de cocodrilo tocando un bombardino y repitiendo la frase "Tralalero Tralalá". Así nació el Bombardino Cocodrilo, pionero involuntario de una nueva ola de personajes tan extraños como adictivos, que combinan humor, música improvisada y un desprecio absoluto por las narrativas lógicas.
En 2024 se popularizó el término brainrot, o "podredumbre cerebral", para describir el tipo de contenido en internet que refleja el deterioro mental o intelectual de una persona a causa del consumo excesivo de redes sociales y estímulos digitales, según el diccionario de Oxford.
Aunque suene alarmante, el brainrot también se convirtió en una forma de humor autoreferencial: surgieron memes que se burlan del propio ocio digital y de la pérdida de sentido frente a lo absurdo.
Ejemplos claros de esta estética son fenómenos como Skibidi Toilet, con sus inodoros danzantes y cámaras antropomórficas que dominaron los disfraces virales de 2023.
A inicios de 2025, el brainrot tomó un rumbo aún más delirante con el llamado brainrot italiano. Todo comenzó con la imagen de un tiburón con patas de gallo acompañado por una voz artificial en italiano.
El caos estético y la mezcla de idiomas captaron la atención de los usuarios, que rápidamente empezaron a replicar y reinventar el concepto.
Fue así como nació Tralalero Tralalá, un tiburón con tenis Nike azules que se convirtió en uno de los íconos más reconocibles de esta corriente absurda, marcando el inicio de una tendencia donde el sinsentido no solo reina, sino que divierte y une comunidades enteras bajo el estandarte del delirio digital.
Algunos de los más populares en este universo digital son:
Tralalero Tralalá: un tiburón con tres patas y zapatillas Nike.
Bombardino Cocodrilo: una mezcla de reptil y avión bombardero.
Chimpanzini Bananini: un mono encerrado en una cáscara de plátano.
Frigo Camelo: un camello con cuerpo de refrigerador.
Ballerina Capuchina: bailarina con cabeza de taza, casada con Capuchino Assassino.
Lirilí Larilá: elefante-cactus con sandalias.
El fenómeno ha escalado: los fans han creado arcos argumentales, alianzas entre personajes e incluso peleas épicas al estilo de una caricatura postmoderna.
Hilo con los mejores Brainrots
— Relatos de André (@relatosdeandre) April 17, 2025
1. TRALALERO TRALALA pic.twitter.com/MD30AYs0Oi
Todo con una estética saturada, estridente, y con canciones que se cuelan incluso en estadios de fútbol, como en el clásico Banfield-Lanús, donde un gol fue celebrado con el ya icónico "Tralalero Tralalá".
Pero no todo es colorido. La letra original de la canción que dio origen a esta moda contiene frases ofensivas y blasfemas, lo que ha generado polémica. Con referencias vulgares a religiones y figuras familiares, el fenómeno también deja entrever cómo lo viral puede desbordarse peligrosamente más allá del humor inocente.
Y así, lo que comenzó como un simple chiste de internet, ha mutado en un monstruo cultural lleno de colores, locura... y controversia.