La eutanasia o muerte asistida sigue siendo tema de debate para muchas personas; mientras esto ocurre, algunos países del mundo han legalizado el derecho de toda persona a decidir cuándo terminar con su vida, sobre todo si está pasando por una enfermedad terminal o sus condiciones físicas le impiden desarrollarse a plenitud.
Un ejemplo es lo ocurrido con el ex primer ministro de Países Bajos, Dries Van Agt, quien murió tomando la mano de su esposa Agnes en una eutanasia conjunta. Tras pasar 70 años juntos y ver muy mermada su salud, ambos decidieron poner fin a sus días en este mundo.
Van Agt y su esposa murieron el día 5 de febrero, aunque su familia decidió hacerlo público tras poco más de una semana; ambos tenían 93 años y sus más allegados aseguraban que eran el uno para el otro.
Fransien van ter Beek, presidenta de la Aosciación Neerlandesa para un Final de Vida Voluntario, aseguró que la pareja falleció en su residencia y ‘tomados de la mano’.
Dries Van Agt sufrió una hemorragia cerebral y desde entonces, a pesar de su recuperación, su salud no volvió a ser la misma.
En Países Bajos, la eutanasia y el suicidio asistido son legales desde el año 2002, siempre y cuando se lleven a cabo bajo la supervisión y control de especialistas, y sobre todo observando tres requisitos principales:
Dries Van Agt es recordado por su apoyo al pueblo de Palestina; fue fundador de ‘The Rights Forum’, un centro de conocimiento tante de Palestina como de Israel.