Cada 12 de diciembre, millones de fieles se congregan en la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México para celebrar a la Virgen de Guadalupe. Entre rezos, ofrendas y actos de devoción, las Mañanitas a la Virgen ocupan un lugar especial como uno de los momentos más emotivos de esta festividad.
¿Cómo surgieron las Mañanitas a la Virgen? En 1951, las primeras Mañanitas fueron transmitidas de manera improvisada. Según Carlos Salinas Saucedo, productor de este evento, las primeras ediciones consistían en presentaciones informales.
Había un micrófono en la Colegiata y los artistas cantaban lo que querían, recordó. Figuras como Ferrusquilla y músicos callejeros tocaban canciones mientras caminaban hacia la Basílica desde la Calzada de Guadalupe.
Sin embargo, la versión actual de las Mañanitas nació en 1955 gracias a un incidente inesperado. Durante la transmisión, Rafael Solana, conductor invitado, anunció que todo México le cantaría las Mañanitas a la Virgen a la medianoche.
Sin preparación previa, el equipo técnico y el público improvisaron. Gustavo Olguín, organizador del evento, dirigió al público desde el techo de un camión y, al contar "uno, dos, tres", marcó el inicio de una tradición nacional.
Entre los artistas destacados que participaron estuvieron Lola Beltrán, María Victoria y Amalia Mendoza "La Tariácuri", quienes llevaron la música tradicional mexicana al corazón de este evento religioso.
Grupos emblemáticos como el Mariachi Vargas de Tecalitlán y el Mariachi Gama Mil enriquecieron la experiencia musical, mientras que la transmisión televisiva consolidó la celebración como un evento nacional.
Hoy en día, este espectáculo no solo rinde homenaje a la Virgen de Guadalupe, sino que también celebra el talento artístico y la riqueza cultural de México.