![]() |
José “N”, alias “el Chueco”, habría matado a dos sacerdotes jesuitas y a un guía de turistas en Cerocahui, Chihuahua, por comentarios inofensivos que le molestaron.
De acuerdo con Reforma, “el Chueco” habría retado a los hermanos Berrelleza Rábago a un tercer partido de béisbol, luego de que su equipo y el del edil Daniel Silva hubieran perdido contra los de Cerocahui en dos partidos de semifinal en la liga de la Sierra Tarahumara.
Los hermanos Berrelleza Rábago aceptaron jugar el tercer partido. Pero cometieron un error: hacerle un comentario a José “N”. Paul Osvaldo le expresó al narco: “nos vemos al rato, ¡pero tranquilos, sin armas!, a lo cual el narco enfureció y segundos después fue a su casa para incendiarla y matarlo.
Ante esto, Jesús Armando, su hermano, emprendió la huida y camino sin parar durante 15 días hasta Choix, Sinaloa, a unos 156 kilómetros de Cerocahui.
Sin importarle sus abusos y con delirios de capo, “el Chueco” se fue de fiesta luego del crimen y de esconder el cuerpo de Paul Osvaldo.
Llegó al hotel Misión Cerocahui. Pedro Palma, guía de turistas, pidió moderar su festejo: “Tengo turistas, bájale por favor”. “El Chueco” arremetió contra el guía de turistas, amenazando con un arma.
Pedro Palma buscó salvar su vida y escapó hacia el templo jesuita de San Javier, frente al hotel. Allí, José “N” lo alcanzó para asesinarlo, al igual que a Javier Morales y Joaquín Mora, dos sacerdotes jesuitas que salieron para salvar al guía de turistas.