Tareas pendientes

Primero que nada feliz Año Nuevo a todos ustedes amables lectores.

En segundo lugar, debemos de abrir muy bien los ojos e irnos preparando para enfrentar con éxito la crisis económica que se avecina, privilegiando a fondo el trabajo productivo, la motivación, la búsqueda constante de la eficiencia, la tenacidad, el estudio, el esfuerzo, la innovación y sobre todo la unidad nacional para así poder salir adelante.

Hago hincapié  en mencionar  la unidad nacional, porque ésta resulta indispensable para resolver juntos los grandes problemas que aquejan a nuestra nación.

Divididos los mexicanos perderemos y retrocederemos, máxime que a partir del 20 de enero le agregaremos a los males internos que ya padecemos, los que pueda causarnos el presidente del país vecino quien culpa a México de los problemas que afectan a los norteamericanos y como buen populista que es, tratará de quedar bien con sus electores aplicando medidas extremas que podrían causarnos daños severos.

Menciono todo lo anterior para estar preparados, porque este año la economía mexicana enfrentará una situación particularmente difícil debido a las erróneas políticas públicas implementadas por quienes nos gobiernan, mismas que están enfocadas  no a mejorar la salud, ni la educación, ni la infraestructura; sino a mantener clientelas electorales mediante la dádiva permanente para así amarrar votos y utilizarlos a su favor en los próximos comicios.

Solo que ya no hay  dinero para pagar tanto gasto y menos recursos habrá cuando irresponsablemente se planea incorporar a más personas en edad de trabajar a los llamados programas sociales.

Simplemente habrá menos dinero para satisfacer las carencias y rezagos, porque adicionalmente se les seguirá inyectando dinero a los grandes elefantes blancos que  inició la administración anterior por simple ocurrencia y sin los estudios adecuados para comprobar su rentabilidad, haciendo que el 2025 sea un año con mucho más complejidad que los anteriores.

Si a  esto se le agrega el que PEMEX y CFE seguirán perdiendo dinero porque no hay la intención de sanearlas eliminando la corrupción, los desperdicios, las prestaciones sociales impagables y el exceso de personal; los enormes boquetes financieros habrá que rellenarlos con aumento de impuestos,  emisión monetaria que aceleraría la inflación o con más préstamos.

Por esas razones debemos hacer un llamado respetuoso pero firme a nuestras autoridades para que revisen a fondo los gastos, calculen bien los ingresos, no dilapiden nuestro dinero en tonterías, atiendan lo prioritario y ya no expriman más a los contribuyentes cautivos, ni anden de quedabién regalándole petróleo a Cuba.

Más bien metan en cintura a quienes están en la economía informal y promuevan la inversión productiva que genera empleos bien pagados.

Lo hemos dicho hasta el cansancio: El empleo productivo es el mejor programa social que existe en el mundo, porque genera riqueza, satisfacción personal y autosuficiencia

También genera impuestos que bien empleados harán que la economía crezca, el desarrollo avance y México pueda salir de su postración.

Como para poner estos puntos en la lista de nuestros propósitos de año nuevo.

¿No les parece a Ustedes?

Muchas gracias y buen fin de semana.